El Estado Palestino: ¿Una realidad o una utopía?

Jorge Uribe Piedrahíta

Comunicador Social/Periodista

Desde hace algunas semanas, los gobiernos han puesto atención a las discusiones en la ONU, relacionadas con la creación del Estado Palestino; la misma que ha estado marcada por la bipolaridad de los países: Unos promueven este proyecto a través de la votación en la Asamblea General, otros optan por un diálogo directo entre Israel y la Autoridad Palestina, cuyo resultado sea una división limítrofe consensuada.

Desde 1947, la comunidad internacional ha abogado por la convivencia pacífica entre estos pueblos. Los acuerdos de Oslo en 1993 fueron un gran salto a este sueño, ya que se le otorgó autonomía política y administrativa a la Autoridad Palestina en los territorios de Gaza y Cisjordania y se definió un proceso evolutivo de negociación para constituir un Estado.

Así mismo, la Conferencia de Anápolis, organizada en noviembre de 2007 por la ONU, la Unión Europea, Rusia y EUA, al igual que la resolución de 1850 de diciembre de 2008, adoptada por el Consejo de Seguridad de la ONU, reafirmaron la voluntad política de la comunidad internacional para alcanzar un acuerdo sostenible de coexistencia pacífica y mutuo reconocimiento.

Infortunadamente, se han presentado dificultades por la posición del grupo armado Hamas, que tiene influencia y control sobre la franja de Gaza y cuyo objetivo es eliminar a Israel.  Igualmente, yace el debate de la delimitación fronteriza de los dos Estados, la posición frente a los asentamientos israelitas en Cisjordania y la definición de la soberanía sobre Jerusalén Este, que para Israel constituye su capital indivisible.

Y es que está claro que una mera resolución del débil organismo de la ONU, que se parece a un circo cultural de gobiernos; no sería la solución al problema, es necesaria la intervención de facilitadores con experiencia y solidez, que sean capaces de construir un diálogo sincero y fraterno entre las partes.

Nadie niega la necesidad de la existencia del Estado Palestino, pues más allá de las razones, hay un derecho que les obsequia la historia por ser un pueblo sufrido, pero su creación debe estar sustentada en la paz y no en el establecimiento de profundas diferencias. En primera instancia, es urgente el cese de amenazas contra Israel por parte de Hamas. Seguidamente, se debe definir una estructura fronteriza.

Por ahora es válido asegurar que el ambiente actual, es el propicio para alcanzar este importante objetivo estratégico: La mayoría de los israelitas y la comunidad internacional respaldan la creación del un Estado Palestino y el gobierno de Israel quiere participar en un plan de trabajo conjunto para lograr un acuerdo entre las partes. El mundo se prepara para ser testigo de un acontecimiento histórico: El fin de la discordia en Medio Oriente; la convivencia entre dos pueblos libres y soberanos; y el importante rol de la ONU en una negociación que debe beneficiar a ambas partes.