Dilma, la Dama de Hierro de Lula

Jorge Uribe Piedrahíta

Comunicador Social/Periodista Colombia

Nov 3, 2010 @ 22:23

Los cariocas eligieron a Dilma Rousseff como nueva conductora de la gran potencia suramericana; la primera mujer presidente para esta nación y la duodécima en la región; pero realmente la que suscitará la mayor atención por tratarse de Brasil; sobre todo cuando tendrá que evidenciar gran habilidad para llenar el vacío que deja el popular y carismático Luiz Inacio Lula da Silva, manejar el pujante protagonismo internacional, la complicada gobernabilidad interna y los enormes desafíos económicos y sociales que los han convertido en la octava economía del mundo.

La Dama de Hierro de Lula, asume un cargo adornado con grandes lujos; no siempre un mandatario llega al poder con amplia mayoría en el Parlamento, una expansión del PIB que superará el 7% en 2010 y una población satisfecha con las mejoras del nivel de vida de los últimos ocho años cuando 29 millones de habitantes salieron de la pobreza.

Sin embargo, el presidente más famoso de la historia de Brasil, también le deja a su pupila, una distinguida economista de perfil tecnócrata, con poco carisma y baja popularidad; los grandes desafíos y fragilidades económicas y sociales de un país de 190 millones de pobladores; donde el analfabetismo todavía ronda el 10% y la falta de saneamiento afecta a la mitad del territorio.

“Lula fue un buen presidente, pero no se puede tapar con la luna los riesgos que asumió para obtener logros y que finalmente dejaron grandes deudas en educación, infraestructura, seguridad pública, corrupción y grandes reformas en el costoso sistema de pensiones e impuestos”, describió Rodrigo Escobar Orrego, economista.

Sopena de que Rousseff, de 62 años, prometió continuar con las políticas económicas y sociales del actual Jefe de Estado; seguro impregnará de toque personal todas sus proyectos, entre los que está sacar de la pobreza extrema a más de 20 millones de brasileros y hacer de su nación un “país de clase media”.

Brasil, sede de la Copa del Mundo en 2014 y de las Olimpíadas en 2016; tiene grandes problemas en infraestructura, que debe solucionar para convertirse en un gran exportador petrolero explotando gigantescos yacimientos descubiertos a miles de kilómetros bajo el mar.

Reemplazando a una estrella del Pop

Indiscutiblemente, el gran reto que se fija la nueva mandataria de los brasileños es reemplazar al hombre que puso de moda a Brasil en escenarios internacionales. Fue Lula quien posicionó y centró la atención de la región en el desarrollo sostenible de su país. Lo más seguro es que su sucesora continúe la política exterior de su mentor, aunque evitando las cuestiones más polémicas, ya que no tiene el carisma ni la popularidad para soportar las críticas que recibirá si elogia a los presidentes Mahmoud Ahmadinejad de Irán, Hugo Rafael Chávez Frías de Venezuela y al ex presidente Fidel Alejandro Castro Ruz.

Dilma, que defiende la política fiscal responsable, requerirá de multimillonarias inversiones para hacer frente a los retos de su gobierno, pero contará con un crecimiento económico más modesto que el de este año.