My title page contents

¿Qué pasó en Ecuador?

“Grotesco, simplemente caricaturesco fue ver al Presidente de Ecuador, Rafael Correa, desafiando a la turba como un matón de barrio, desabotonándose la camisa. Ahí dejó plasmada su percepción del poder político que le entregaron los electores. Ahí demostró que es un hombre violento, rencoroso, que no representa la legitimidad de un pueblo, sino el abuso de la hegemonía de un hombre”, así describió Diego Stalin Carrión, habitante de Catamayo, Ecuador; al individuo que preside su país.

El pasado jueves en la mañana, una protesta policiaca sorprendió al Gobierno de Rafael Vicente Correa Delgado; en una de las peores crisis desde que asumió el poder el 15 de enero de 2007; suscitada por la supresión de los beneficios de la Fuerza Pública.

Miembros de la Policía y del Ejército amotinados se tomaron el Aeropuerto Internacional Mariscal Sucre y las instalaciones del Regimiento Quito. Sectores de la oposición y algunos funcionarios públicos se sumaron a la manifestación. En los hechos, el primer mandatario resultó agredido y terminó exilado en un hospital de la institución policial.

La justificación del motín fue por la aprobación, con 115 votos, de la Ley Orgánica de Servicio Público en la Asamblea de ese país. La ley se aprobó, según lo propuso el Gobierno, sin tener en cuenta los argumentos de los opositores. La polémica desatada por la ley, radica en que los servidores públicos mayores de 70, que se acojan a un mecanismo de jubilación, recibirán el pago de sus indemnizaciones en efectivo. Mientras que los de 65 a 69 años recibirán un 50% en efectivo y el resto en bonos del Estado.

El problema de no tener un plan de riesgos reputacional

La imagen de un Correa desafiante, determinó el arrebato que contiene a este Jefe de Estado. En vez de seguir los conductos idóneos, y obligar a que el comando policial retomara el control y de delegar la tarea al Ministro del Interior; El superhéroe acudió personalmente al cuartel principal; donde fue recibido con rechiflas. Además de su tono desafiante, incitó a los presentes a que lo asesinaran.

La respuesta fue contundente, los rebeldes lanzaron gases lacrimógenos al Mandatario y su comitiva; lo que obligó a que este grupo abandonara el recinto y se dirigiese al Hospital de la Policía; pues Correa, operado hace poco de una rodilla; había sufrido una lesión.

“Cuando un gobierno es autócrata, y no debate las leyes; se originan esas escenas de horror. Correa no cede un paso atrás; es vilmente rencoroso; es vilmente opresor”, agrega Carrión; quien también asegura que es un error mandar a los militares oficialistas a acabar con los sublevados, en vez de un buscar una salida pacifica al asunto.

Por ahora, la comunidad internacional apoyó unilateralmente a Correa en sus disposiciones. Pero hay que ser cautelosos cuando no se reconoce el contexto político y social de una nación. En el caso de Colombia, debe haber prudencia, sobre todo cuando los vecinos se han intrometido en muchos asuntos internos, al punto de establecer precedentes y declarar opiniones influenciadoras.

Lo seguro es que Rafael Vicente, quien en sus relaciones con Colombia ha evidenciado su actitud de no olvidar tan fácil; seguro asumirá medidas extremas de destituciones y reestructuraciones internas a la fuerza policial; porque así actúan los pregoneros del socialismo del siglo XXI: No les importa los debates abiertos, la lucha de la oposición y el lamento de un pueblo. Ellos en su afán arrasan con lo que haya y acaban con los antioficialistas.


About Jorge Uribe Piedrahíta

Comunicador Social con énfasis en Periodismo Digital y Cibermedios.Desde que inició sus estudios profesionales se interesó por la investigación, la docencia universitaria, el periodismo y la comunicación organizacional. Temas que lo llevaron a coordinar el semillero de investigación “Análisis del Discurso”, en la Universidad EAFIT.