por Jorge Uribe Piedrahíta
Comunicador Social/Periodista Colombia
Colombia, aunque no pertenece al G-20, fue invitada a participar de esta reunión, una convocatoria honorífica, que ratifica la confianza alcanzada por el mandatario saliente, en su política internacional. El Presidente tuvo la oportunidad de exponer los temas actuales del país y de evidenciar los buenos avances que se obtuvieron bajo sus 8 años de gobierno.
Después de este encuentro, más que resaltar la visita de Colombia, es oportuno deslumbrar las dos posiciones sobre la economía mundial que se percibieron en la reunión: De una parte, la de Estados Unidos, de otra, la de la Unión Europea.
Por su parte, Estados Unidos expuso que la prioridad es no comprometer la recuperación de la economía con excesivos ajustes fiscales; y Europa, en cabeza de Alemania, se mantuvo en la tesis de que lo prioritario es retornar a los patrones de austeridad fiscal, que se olvidaron en el 2009, bajo el esfuerzo generalizado de salir de la crisis que se vivía, con programas de gasto público deficitario.
“Para EUA es simple, no se puede tratar de recuperar los mercados dejando de consumir, ni invirtiendo, o generando un crecimiento moderado, pues para ellos el desarrollo debe darse ahora; y en contra parte, Europa propone un control detallado del déficit fiscal; por eso no es sorprendente que se proponga leyes para ampliar la edad de pensión o aumentar los impuestos”, explica Juan Esteban Saldarriaga, analista económico.
El punto de encuentro de EUA y Europa es que la gran potencia económica de la década es Asia, y por eso los esquemas comerciales deben enfocarse en la implementación de actividades en los mercados de dicho continente; además, el control y vigilancia del sector financiero debe estar en las agendas de los gobiernos, para impedir posible alteraciones del gremio hacia el futuro.
Las lecciones de la Cumbre de Toronto no son muy claras en este momento, ni definen la prioridad de la comunidad internacional en el aspecto económico. Lo claro es que cada nación debe implementar estrategias que impidan posibles recesiones financieras, motiven la reducción del desempleo y permitan bajar los índices de pobreza y hambruna en los que están sometidos los territorios actuales.
Y calificó SXGTo otorguen el grado de inversión a la deuda pública colombiana; además, debe ubicar a Colombia como miembro activo de la OECD y de la APEC; y lograr que el mejoramiento económico de Colombia se traduzca en la inclusión en el G-20, porque este país tiene todas las características y recursos para involucrarse en este gremio.
Follow Us!