Crónica de una victoria anunciada

por Jorge Uribe Piedrahíta

Comunicador Social/Periodista Colombia

La elección de Laura Chinchilla Miranda como Presidente de Costa Rica, representa la confianza que han obtenido las mujeres en ámbitos políticos, sociales y democráticos, y el abandono por años de ejecuciones masculinas, en los que solo se han producido guerras y desórdenes económicos. Costa Rica, Chile, Panamá y Argentina son naciones que han sido presididas por féminas; dejando a un lado largas tradiciones en las que tienen que ser nombrados dirigentes hombres. Con el triunfo de la nueva mandataria se continúa las políticas de Óscar Arias y se resalta la capacidad, inteligencia y perspicacia de la nueva Presidente.

Los resultados de la contienda electoral, además de determinar quién sucedería al actual gobernante, reflejó la madurez política de los ticos, puesto que “se logró una participación masiva y significativa; así la jornada se desarrolló en completa normalidad y los otros candidatos reconocieron oportunamente la derrota en las urnas,” como lo describe María Emma Mejía, política colombiana y dirigente de la delegación de la ONU para la vigilancia de la actividad democrática en este país.

Chinchilla obtuvo el cargo a través de procesos legales, sin intervenciones corruptas, por el contrario es una líder con excelente curriculum vitae; sus propuestas fueron coherentes y valoradas por los votantes, quienes le dieron un 47% del apoyo general, aunque esta cifra no es elevada, si compromete a la ganadora  a buscar la unidad nacional y política de los partidos, con lo que asegura la escasez de obstáculos para la implementación de proyectos, tales como los TLC, donde ella ha jugado un papel importante después de firmar el Tratado de Libre Comercio de Centroamérica con Estados unidos, llamado CAFTA.

Desde su primer discurso evidenció el enfoque de su gobierno: La internacionalización de Costa Rica, sostenida por los sectores políticos y sociales, y desarrollada con la Unión Europea, China y Singapur. “Es una dama con gran talento y profesionalismo, su actividad como vicepresidente estuvo marcada por las relaciones mundiales y la necesidad que siempre ha sentido por una Costa Rica más posicionada en la Tierra,” comenta Mauricio Vélez, analista político.

Las ventajas para la gobernabilidad de Chinchilla será el ingreso per cápita, que es el más alto de Centroamérica (11.600 dólares), sopena de ser un país de poca extensión territorial; también es el segundo mayor productor de banano, después de Ecuador; es calificado como el país con mayor concentración de biodiversidad del Planeta, y el desarrollo en piezas de tecnología para computadores, lo determinan como gran centro atractivo para inversionistas americanos, chinos y europeos.

El talón de Aquiles para la primera mujer presidente de los ticos es la criminalidad callejera y los narcotraficantes desterrados por el gobierno de Uribe, que han emigrado para Centroamérica y por ende, en este país se han aumentado los índices de violencia. Como una fuerte estrategia contra estas falencias, Colombia sería un socio importante en la asesoría que se puede otorgar, con el objetivo de implementar actividades ejecutadas por el ejército nacional, y de Costa Rica se adquiriría la experiencia en temas como turismo, tecnología y fabricación de equipos aplicados a la medicina de alta complejidad.

Para Colombia llega una aliada importante en Centroamérica, pues el campo comercial y gubernamental edificado con Arias, será moldeado, fortalecido y enfocado hacia la lucha contra el narcotráfico y el terrorismo. Además, los empresarios nacionales ya han llegado a la creación de escenarios mercantiles. Y en su primera elocución elogió al país y narró las vivencias de sus padres como embajadores de Costa Rica en Bogotá. Aunque era una victoria anunciada, para la Nación es oportuno resaltar la importancia de este suceso para la economía y las relaciones con América Central.